Las tortugas es uno de los grupos de vertebrados más antiguos que existen sobre la tierra, han sobrevivido a través de períodos estables y de tiempos de cambios ambientales extremos.
Las tortugas iniciaron su evolución en el periodo Triásico, a principios del Mesozoico, hace por lo menos 200 millones de años, antes de que los grandes reptiles acuáticos, terrestres y voladores, como los ictiosaurios, dinosaurios y pterodáctilos, alcanzaran su máximo esplendor.
En la actualidad existen alrededor de 75 géneros y más de 220 especies de tortugas terrestes, dulceacuicolas y marinas, de las cuales sólo seis géneros y ochos especies son MARINAS.
Debido a que existen escasos registros fósiles de las formas más primitivas, es dificil precisar el origen evolutivo de las tortugas.
El fósil llamado Eunotosaurus (pequeño saurio de cuerpo deprimido), aunque no se le considera como tortuga, sí podría ser reprensentante de una línea evolutiva paralela, ya que sus ocho costillas hacen contacto unas con otras, las cuales forman un caparacho incompleto cubierto por delgadas placas osificadas de origen dérmico, arregladas aparentemente en filas longitudinales, además tiene 10 vertebras, como los quelonios; su craneo se encontró incompleto, pero presentaba paladar, no se encontró la mandibula inferior; en la parte ventral de su esqueleto faltaban los tipicos huesos dérmicos que dan origen al plastrón de las tortugas; además, conserva la cintura pectoral con claviculas e interclaviculas, ignorándose las características morfológicas de sus extremidades.
A finales del periodo Triásico, se ubica el fósil Proganochelys, tortuga que fue posiblemente semiacuática. En estos fósiles se observa el carapacho de forma moderna, el peto tiene elementos óseos extras (carácter primitivo que aún se conserva en tortugas actuales y ocasionalmente la tortuga golfina (Lepidochelys olivacea)), poseia dientes, pero sólo en el paladar, la cintura era de carácter primitivo, y la cabeza y extremidades poco a nada podían retraerse dentro del carapacho.
En el Cretácico superior en Norteamérica existieron las gigantescas tortugas marinas, de poco más de tres metros de longitud total y más de cuatro de envergadura en las aletas anteriores, las placas costales del carapacho son muy angostas, por lo que presentan amplias fontanelas transversales; el carapacho de casi dos metros de largo y muy posiblemente el plastrón estaban cubiertos de escudos córneos, como en las tortugas modernas.
La familia Cheloniidae incluye a las tortugas MARINAS de nuestro tiempo. Los primeros representantes del grupo aparecieron a finales del Mesozoico, en el Cretácico superior, un gran número de géneros proliferaron en todos los mares tropicales de la época, pero la mayoría se extinguieron antes de terminar el Cenozoico, quedando en la actualidad sólo cinco géneros con siete especies. Por otra parte el origen de la familia Demochelyidae no es claro, se han encontrado cuatro géneros de los cuales sólo sobrevive uno hasta nuestros días.
A diferencia de las tortugas terrestres, las tortugas MARINAS se adaptarón a su habitat marino desarrollando aletas en forma de remo y una concha más estelizada la cual ayuda a nadar con rapidez, como también a comparación de las tortugas terrestres, las tortugas marinas han perdido la capacidad de retraer sus extremedidades.
...a pesar de ser uno de los organismos que ha sobrevivido a diversos cambio ambientales que han ocasionado la extinción de otras especies, su supervivencia hoy en día esta en duda más que nunca.
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